Aquella donde nací, crecí, reí, lloré, toda para mí.
La otra donde aquel presente me dejó
Para presentarme a una nueva esencia, Christine.
La mano de mi esencia,
Aquella que un día la invitó a un lugar nuevo,
gobernado por una nueva cultura, por un presente distinto y una nueva lengua.
Aquella que sin prejuicios le regaló amor, bondad, disciplina, amistad y paciencia.
Aquella que desde entonces se apoderó de muchos monólogos de mi hija.
“Olga”, el título de un discurso, de un dibujo, de lo correcto, de la obediencia.
Olga, gracias por éstos 3 años de cariño, de valores, de sincero amor para con mi hija,
Por ser una mano para ella, por ser la mano de mi esencia.
Gracias,
Oscar Moreno Figueroa
“El pare de la Christine”.
Barcelona, 24 de Junio de 2011.
P.D.: Querida Olga Yepes, Carolina y Yo te dedicamos estas palabras por éstos tres años que dedicaste a Christine, formando parte importante de su Educación y de su capital intelectual y emotivo.
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